Mantener una facha correctamente pintada no es solamente que se mantenga bonita, es mantener todos los beneficios que aporta respecto a la protección de los agente climatológicos. 

Existe una gran variedad de tipo de pintura para fachadas y decidirse por la opción correcta no siempre es fácil si no cuentas con buenos profesionales:

• Pintura fachadas acrílica: Es una de las más comunes debido a su fácil aplicación y son una buena elección para fachadas que necesiten un repintado. La duración máxima de estas pinturas, dependiendo del modelo exacto, es de entre 3 y 10 años.
• Pintura para exteriores de resina de silicona o recubrimientos siliconados en base agua: Si tu edificio está cerca del mar este es el tipo de pintura ideal para ti. Gracias a sus componente evita que la humedad se absorba. ¿Quieres mantener el color natural de los materiales? Tranquilo, esta pintura también existe en base incolora, así tus ladrillos seguirán luciendo igual de naturales y tendrán un extra de protección.
• Pintura fachadas de Siloxano: Esta pintura sigue estando pensada para proteger a las fachadas de la humedad, pero especialmente para climas muy húmedos. Una de sus mejores ventajas es que son pinturas que gracias a la lluvia se limpian, por lo que no tendrás que estar pensando en su limpieza. Sus 15 años de durabilidad es otro de sus beneficios irresistibles.
• Recubrimiento elastomérico, pintura elástica: Como su nombre bien indica, la elesticidad de esta pintura es su principal característica. Una de las mejores opciones para cubrir pequeñas fisuras o materiales porosos.
• Pintura fachadas de silicato o revestimiento al silicato: Si tu fachada tiene humedad residual, esta es tu pintura. Gracias a su composición se adhiere perfectamente a superficies de minerales como ladrillos, hormigón, etc.